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Amenazan a periodistas de Huaral por evitar corrida de toros

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A raíz de los cuestionamientos que justificadamente hacen algunos medios en contra de la utilización del estadio Julio Lores Colán para actividades festivas como bailes, verbena y una corrida de toros, con motivo del 37 Aniversario Provincial, que indudablemente ocasionarán graves daños al gramado, cuando justamente se vienen las fechas finales de los campeonatos locales, cierto tipo de personas aun no identificadas, coludidas con elementos lumpenescos se han permitido amenazar, incluso de muerte a algunos periodistas de Huaral.

El periodista Oswaldo Casazola, refirió que fue interceptado por un sujeto, que en lenguaje matonesco y delincuencial, lo amenazó de muerte, señalando que si la Feria fracasaba, él iba a ser el culpable, por incitar a la población y si se realizaba alguna marcha, abría una balacera porque tenían gente de construcción civil, “Lo cual ellos han desmentido”, puntualizó.


“Deploro esa actitud que va en contra de la libertad de prensa y de la libertad que tenemos como seres humanos. No se nos puede estar amenazando ni amedrentando de esa manera, para manejar nuestra línea periodística, impidiendo nuestra libertad de expresión”, expresó.

Luego expresó su solidaridad con el periodista Juan Carlos Chuquilín, al que durante la emisión de su programa, 3 personas se introdujeron en la cabina (Uno de los cuales era el que amenazó a Casazola), con la intención de amedrentarlo y amenazarlo, “lo cual como prensa no podemos permitir, porque por más que tengamos derecho a conservar nuestra vida, no podemos retroceder. Estas actitudes tenemos que rechazarlas y unirnos más que nunca para defender la vida de los periodistas, que se ha convertido en una profesión peligrosa”. Señaló.

Casazola contó que fue abordado cuando ya llegaba a su casa, dijo que al parecer conocían su recorrido. Lo detuvieron en la esquina cercana a su domicilio. El que lo amenazó, bajó solo del vehículo, cuyo conductor mantenía el motor encendido. Protegía su rostro con un gorro y su vocabulario era prepotente y hamponesco.

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